Como #ConHumorLaCuarentenaSePasaMejor, aquí os dejo esta versión del «Romance del prisionero» adaptada a estos tiempos del coronavirus que he escuchado esta mañana desde el balcón de mi casa a una voz anónima que lo cantaba.
Yo me limito aquí a transcribirlo, añadiendo alguna pequeña nota a modo de glosa. La canción decía, poco más o menos, así:
Que por marzo era, por marzo,
cuando aún no hace calor,
cuando los trigos no encañan
ni están los campos en flor[1],cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor[2],
cuando los enamorados
van a servir al amor[3];sino yo, triste, cuitado,
que vivo en esta prisión;
que ni sé cuándo es de día
ni cuándo las noches son,confinado aquí en mi casa
por un virus peleón.
¡Mátemelo un buen virólogo!
¡Déle Dios buen galardón!
[1] ni están los campos en flor: aunque ya estamos entrando en la primavera, en el calendario y en el tiempo atmosférico, pero ahora no en El Corte Inglés.
[2] cuando canta la calandria / y responde el ruiseñor: en efecto, en estos días en los que apenas hay tránsito de coches y personas por las calles, se oye más el alegre trino de los pajarillos.
[3] cuando los enamorados / van a servir al amor: se sobrentiende que virtualmente, vía chat, videollamada, Skype, etc.