Dedico la entrada de hoy a
Andresa Induráin Garcés (1929-2020),
in memoriam
Fechado el 27-VI-1970, este es el sexto poema de la segunda sección del poemario Ciego en Granada (1975), de Miguel dʼOrs. Lo elijo para reanudar hoy las entradas del blog, después de unos meses sin publicar nada —después de un tiempo necesario de silencio y reflexión. En estos momentos, el poema no requiere para mí —no quiere decir, ni mucho menos, que no lo merezca— mayor comentario.
Dice sencillamente así:
Oh, muerte, te llevamos sembrada en nuestra carne;
en nuestras vidas creces y maduras.
Vas pujándonos dentro, extendiendo en nosotros
tu ramaje; nos llenas, nos invades…
Y entonces comprendemos
que una vida solo sirve para que de ella
se alimente una Muerte[1].
[1] Cito por Miguel dʼOrs, Poesías completas 2019, Sevilla, Renacimiento, 2019, p. 566.