La mojigata, escrita en 1791, fue representada en 1804[1]. Leandro Fernández de Moratín la compone en romance octosílabo. Posee igualmente un carácter satírico, en esta ocasión contra la falsa piedad; aunque fue tibio en materias religiosas, Moratín hijo deseaba una fe robusta a los creyentes que los librara de la hipocresía con la cual dificultaban la libre convivencia ciudadana. Esta fue, en general, la actitud de los ilustrados, tanto creyentes como impíos: reclamar una religiosidad que no fuera ni agresiva ni inculta.
El argumento puede resumirse así: dos hermanos, don Martín y don Luis, han educado de forma distinta a sus hijas: severo uno, tolerante el otro. Como resultado de ello, Inés, hija de don Luis, es sincera y natural; Clara es hipócrita y falsa, y finge que va a tomar los hábitos para cobrar una herencia. El tema principal es, nuevamente, la educación de los jóvenes. La obra ha sido comparada con Tartufo de Molière y con Marta la piadosa de Tirso de Molina.
[1] Texto extractado, con ligeros retoques, de la introducción a Leandro Fernández de Moratín, El sí de las niñas, ed. de Mariela Insúa y Carlos Mata Induráin, Madrid, Editex, 2012.